Acabo de leer las dos últimas entradas del blog, escritas por mi hermana (bueno, más bien, “copiadas” por mi hermana) y no sé si me he enterado muy bien de la película.
Por lo que he
podido entender, hay un medicamento que te pone el pelo más grueso y retrasa su
caída. Y parece que un japonés ha hecho crecer pelo en ratas (un tipo de ratas
rosas que no tiene pelo, no las he visto en mi vida por cierto…), y ahora
quieren hacer lo mismo con nosotros. O sea, que saldría pelo donde ahora no hay.
A mí eso de tomar
medicamentos no me convence. Porque yo me pregunto, ¿y si en vez de poner más
grueso el pelo de la cabeza, te crece el de los brazos? O peor ¿te engordan los
pelillos de dentro de la nariz? ¿Qué pasa, que te ahogas?? Y eso de las ratas
¿cómo saben dónde va a salir el pelo exactamente? Imagínate que te sale, en vez
de en la cabeza, en la planta de los pies… ¿y ahora qué? Que parece que vas
todo el día andando sobre una alfombra… ¿Cómo te lo solucionan ahora, eh, eh,
eh???
Desde luego,
conmigo que no cuenten para utilizarme de cobaya…