Mira,
majo, siento decirte esto, pero hagas lo que hagas, si el pelo está por caerse,
se te va a caer, quieras o no quieras. Ya lo sé que es una faena, pero cuanto
antes te hagas a la idea mejor...
Si
eres de pueblo y te supone mucho complejo, ponte una boina, nadie notará la
diferencia. Aunque, ahora que lo pienso, si eres del sur y quieres pasar
desapercibido, casi mejor te pones una montera (y coge un capote pa´disimular).
Si por el contrario, tu estilo es más urbanita, puedes echarte una mano de
pintura en la cabeza como hace John Travolta. Aunque ya te digo que a las
chicas esta solución no les suele gustar mucho, porque luego tienen que
quitarse la pintura con aguarrás y se les estropea la manicura. Y claro, se
cabrean.
La
opción del peluquín a mí personalmente no me termina de convencer, sobre todo
si tu pelo es de un color y el peluquín de otro. Mi consejo es que mires bien
con tu peluquero, o en el chino donde te lo compres, cuál es la tonalidad más
adecuada para ti.
Dice
mi hermana Afrodita que también existen champús, pastillas y otras opciones,
pero que eso es muy largo de explicar y mejor lo dejamos para otro día…